CAP 831

Mientras dormían la siesta Moro entro varias veces a la habitación pero no logro despertarlos. Un rato después Paula giro brutamente quedando encima de Pedro. Le dio literalmente un panzazo.

Pedro: mmmmm, me parece a mi o fue intencional?

Paula: Noo, ya no controlo mi cuerpo. Le respondió tentada de la risa.

Pedro: jajajajajajajajaja ay mi amor! Pobre Annita la vas a marear.

Paula: Toda mi vida fui torpe, imagínate ahora con esta panza incontrolable.

Pedro: Tenés razón, mmmmm que fiaca. Me das un beso?

Lo besa sumamente tierna. Paula: Uno solo? O puedo seguir?

Pedro: shhh, eso no se pregunta seguí. Y fue el quien volvió a besarla.

Paula: Mira, dame la mano. Y se la apoyo en la panza, para que él sintiera las pataditas que estaba dando Anna.

Pedro: Viste? La despertaste cuando giraste, ella dormía la siesta como nosotros. Seguro que nos quiere decir algo.

Paula: Siii, quiere ir a la pileta. Por eso esta haciéndose sentir.

Pedro: Es ella o sos vos la que muere por darse un chapuzón? Mientras le acariciaba la panza y le daba unos tiernos besos en el cuello.

Paula: Nos complotamos en esta oportunidad. Mientras este en la panza yo llevo el control. Algo me dice que después se va a complotar más con vos.

Pedro: Si, viste? Dicen que la relación de Padre-Hija es mas fuerte?

Paula: Por eso lo decía. Yo desde chiquita tuve admiración por mi papá. Y lo seguía a todas partes. Para mi no había nada mas lindo que las cosquillas que me hacia los domingos a la mañana en la cama grande.

Pedro: A mi me pasaba con mi mamá. Asique después vamos a buscar un bebé a si te sigue a vos a todos lados. Por más que te tenga que compartir, me daría mucha ternura.

Paula: Yo quiero que tomemos el compromiso, de no perdernos ningún momento de Anna, porque el tiempo pasa rápido y esta muy próxima a nacer.

Pedro: Te lo prometo. Le respondió mientras la miraba sumamente orgulloso de ella, y le acariciaba la panza.

Paula: Pero lo digo en general, se que por tiempos y trabajos se nos va a complicar compartir algunas cosas. Pero me gustaría bañarla juntos, sentarnos a jugar con ella, dormirla. Y que los domingos sean sagrados. Solo para la familia.

Pedro: Sabes que tenés el poder de enamorarme cada día un poco mas? Compartimos el proyecto de familia. Y te juro que voy a hacer lo imposible para que estemos los tres juntos. Quiero ser un papá sumamente presente.

Paula: Te amamos. Sos el hombre que soñe toda mi vida. Y me encanta poder enamorarte cada día un poco más.

Pedro respondió besandola, con mucha ternura. Realmente era un gran inicio de año para ambos. Estaban formando la familia que tanto habían soñado.

Paula: Vamos a la pileta amor? Ya es tarde, bajo el sol.

Pedro: Si, vamos mi vida. Ponete la malla, y algún pañuelo en la cabeza que esta muy fuerte el sol.

Paula: Si, señor. Y vos también ponete fresco.

Los dos se arreglaron y con Moro se fueron a la pileta. Paula realmente necesitaba refrescarse. Llevar el embarazo en verano era complicado. Al rato los dos estaban nadando y jugando en la pileta. No paraban de reírse.

Paula: amor, no sabes lo bien que me siento en el agua. Me siento liviana, puedo nadar y moverme con mas facilidad.

Pedro: jajajajajajajaja me haces reír Pau, pero todas las embarazadas dicen lo mismo.

Paula: Sii, mira! Intenta hacerme a upa y vas a ver que podes.

Era imposible no reírse de la situación, Pau estaba relajada y eso a Pedro le encantaba. Estaban disfrutando de las vacaciones.

Paula: Gordo, podemos meter a Moro a la pileta? Quiero ver si puede nadar, o al menos ver que hace.

En tono irónico Pedro empezó a gritarle: Moritooo, vení con papá. Vamos a nadar un rato.

Paula: A el también le gusta nadar, miralo. Esta fresco!

Pedro: Moro es un maricon. Donde vos estes, él esta feliz, es eso gorda.

Paula: Siempre igual vos, eh! Te quiero decir un secreto, veni!! Saca a Moro del agua.

Pedro: mmmmmm, miedo. Mientras se acercaba a ella.

Paula le empezó a dar dulces besos en el cuello, y lo despeinaba con sus manos, mientras le susurraba al oído.

Pedro: Me parece que se por donde viene la mano, y temo que me va a gustar. Pero decime.

Paula: Me haces el amor en el agua?

Pedro respondió rápidamente a la propuesta de Pau, la alzo y la apoyo contra uno de los bordes de la pileta. La intensidad de sus besos aumentaba y sus caricias eran cada vez mas intensas.